El reportaje “Nuestros niños trans”, emitido por el programa “Informe Especial” (TVN) el pasado jueves ha sido fuertemente criticado. Organizaciones como Movilh y Fundación Iguales lo han acusado de difundir información falsa, transfóbica y sensacionalista. Como académicos y académicas de psicología, queremos sumarnos al debate enfatizando tres aspectos principales:
1. El reportaje revela un profundo desconocimiento del enfoque de derechos de infancia, presente en la Convención Internacional de Derechos del Niño y en otros instrumentos internacionales, adoptados por la mayoría de los países, incluido Chile. Este enfoque ha llevado a cambios significativos en la legislación y prácticas del Estado chileno y los profesionales de distintos ámbitos, incluyendo a aquellos de los medios de prensa. Sin hacerse cargo de ello, el reportaje sugiere que les padres tienen la autoridad para definir la identidad sexo-genérica de sus hijes, ignorando las demandas de reconocimiento que estos manifiestan. Esta postura minimiza los derechos de les niñes y adolescentes, equiparándolos a las decisiones de les padres, lo que es especialmente problemático dado que, en el contexto familiar, pueden existir dinámicas de violencia y discriminación. El Comité de Derechos del Niño de la ONU ha afirmado que “lo que a juicio de un adulto es el interés superior del niño no puede primar sobre la obligación de respetar todos los derechos del niño enunciados en la Convención» (Observación general 14, 2013);
2. Patologiza y demoniza la transición de género, equiparándola, de manera arbitraria y sin fundamento, a comportamientos negativos como fumar, consumir alcohol o tener malas influencias, así como a enfermedades físicas y mentales. También sugiere que la transición de género es producto de influencias extranjeras o del encierro durante la pandemia, lo cual carece de cualquier evidencia científica;
3. Presenta a les padres que se oponen a la identidad sexo-genérica de sus hijes como víctimas de una supuesta conspiración en la que participan programas estatales, colegios, jueces, médicos, profesores y, en especial, profesionales de la psicología. Se utiliza información errónea y sin respaldo para acusar a estos profesionales de ser responsables de que les niñes sean alejados de sus padres o inducidos a iniciar procesos de transición de género, incluyendo tratamientos hormonales o cirugías. Esto es particularmente grave, ya que se desconoce la legislación chilena vigente en esta materia y se presenta a les niñes y adolescentes como seres pasivos y sin agencia sobre sus propias vidas.
Como profesionales de la psicología y defensores de los derechos humanos expresamos nuestra profunda disconformidad con los contenidos del reportaje emitido por TVN. A nuestro juicio, este fue realizado de manera descuidada y transgresora, con el propósito de resaltar la orientación transfóbica del conductor y de algunas personas entrevistadas. Es alarmante que un canal público, con la obligación de garantizar los derechos de la infancia, promueva un discurso de odio contra las personas transgénero y los profesionales que trabajamos por el bienestar psicosocial de nuestra comunidad.